Identificamos algunos síntomas que, no necesariamente están asociados a los copos blancos, pero pueden indicar que tienes caspa:
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¿Cuál es la principal causa de la caspa y por qué es clave darle un cuidado adecuado al cuero cabelludo?
Una de las principales causas de la caspa es el Malassezia globosa, un tipo de hongo que existe en el cuero cabelludo de todas las personas. Alrededor del 50% de las personas experimentan una reacción negativa ante la presencia de este hongo, reacción que se conoce como caspa. El Malassezia globosa se alimenta de los aceites del cuero cabelludo (también conocidos como sebo); como el ácido oleico. La mitad de las personas en el mundo es sensible a este ácido y si eres parte del 50 %, probablemente tengas caspa.
El exceso de este ácido desequilibra el bienestar del cuero cabelludo lo que produce resequedad, comezón y descamación. La caspa también puede dañar la hidratación natural del cuero cabelludo y generar más resequedad tanto en la piel de la cabeza, como en el resto del cabello. Cuidar el cuero cabelludo es esencial para mantener un pelo de apariencia saludable, a continuación, te daremos un par de recomendaciones para cuidarlo, controlar la caspa y evitar la apariencia de un cabello dañado.
Selecciona productos que cuiden tu cuero cabelludo y tu pelo
Normalmente, cuando se reconocen algunos síntomas de caspa, es común tratar el “problema principal” del cuero cabelludo, que son generalmente las escamas, pero no siempre se presta atención al resto del cabello con apariencia dañada - pasando por alto la relación que hay entre estos dos problemas. Sin embargo, si notas que tienes caspa, pero también le das importancia a tener un cabello suave, brillante y manejable, te recomendamos buscar un shampoo que se adapte a estas necesidades y sea capaz de dejarte un cuero cabelludo hasta 100% libre de caspa con uso regular, mientras también le aporta hidratación y suavidad al resto del pelo.
Para esto, hay shampoos con fórmulas especializadas que mejoran la hidratación de todo el cabello y lo limpian profundamente desde la raíz, dejándolo revitalizado.
Escoge shampoos que tengan un pH balanceado