¿PERO POR QUÉ SE PRODUCE LA CASPA EN LA ADOLESCENCIA? ¡PUEDE SER CULPA DE LAS HORMONAS!
Durante esta fase de la vida el cuerpo está atravesando por un océano de cambios tanto hormonales, como físicos y emocionales. Es en este momento en el que todo se vuelve muy transcendental.
Y es en esta época también en la que el cuerpo es más propenso a sufrir de problemas tales como acné y caspa. Esto ocurre debido a un desbalance que provoca erupciones en la piel – algo que también puede tener un componente genético o de alimentación inadecuada. Sin embargo, existen soluciones efectivas para combatirla.
En el caso específico de la caspa, el hongo presente de forma natural en el cuero cabelludo de todas las personas produce ácido oleico que causa una irritación a la piel del cuero cabelludo, que posteriormente se transformará en la famosa caspa. Este hongo se llama Malassezia Globosa y es un microbio que hace parte de nuestro organismo.
Existen otros factores que también pueden agravar la aparición de la caspa, como los desbalances emocionales. El estrés y la ansiedad también son grandes enemigos de la piel, ya que pueden ayudar a desencadenar diferentes afecciones cutáneas. Así que es importante tomar las cosas con calma y así todo será más sencillo.
Es común llegar a preguntarse si la caspa es contagiosa y la respuesta definitiva es No. Lo clave aquí es enfocarse en combatirla correctamente.
Los signos más comunes de la caspa son:
Picazón en el cuero cabelludo
Escamas de piel en el cuero cabelludo y cabello (algunas veces en las cejas y barba o bigote)
Cuero cabelludo graso
Resequedad del cuero cabelludo
AISLARSE DE AMIGOS O FAMILIA NO ES LA SOLUCIÓN
La caspa es algo que se puede controlar y, precisamente tratar el problema con paciencia, acompañamiento y asertividad es la mejor solución. Muchos no lo saben, pero algunas investigaciones sobre el tema muestran que 1 en cada 2 personas en el mundo sufre o ya sufrió de caspa y que el 50% de estas personas se sienten “menos” que otras por esto.
Además de eso, 1 en 4 personas tienen miedo de que las personas no la acepten porque están sufriendo con la caspa o sienten miedo de sufrir algún tipo de discriminación por la apariencia. Esto impacta negativamente en sus relaciones interpersonales y las perjudica de diferentes formas. Por ello, hay muchas personas que, por vergüenza, se aíslan de su grupo de amigos y familiares y acaban desarrollando otros tipos de problemas debido a la soledad y, durante la adolescencia la soledad no es algo que combine muy bien.
Salir, participar de eventos, aprovechar momentos en familia y amigos es algo que quedará por siempre en la memoria, así que es importante no permitir que la caspa interfiera en estas experiencias importantes.